• Como reflexión esto da espacio a desarrollar la imaginación y el ingenio ya que, si se utiliza de forma adecuada, tal vez se puedan arrendar las maquinarias a colegios, realizar talleres a niños y jóvenes y poder así explorar nuevos negocios que no solo tengan que ver con vender artículos ferreteros, sino que ayudar a contribuir con la imaginación e ingenio en la población cercana y dejar nuestro sello en lo más valioso que tenemos, en la gente.