Introducción
No se puede negar que vivimos en uno de los países más desiguales del mundo y que nos ha resultado muy complicado evitar que la educación que se ofrece a la población mexicana deje de reflejar ese hecho. Con este documento se observarán cuáles son las verdaderas razones por el cual, la población del país se encuentra en esta situación del por qué tan baja calidad en el ámbito de la educación.
A lo largo de los años se ha buscado una estrategia o un modelo educativo con los requisitos necesarios para lograr un buen desarrollo social desde el nivel educativo primario, es por tal motivo que el presente trabajo, trata de recolectar la información adecuada para tener un panorama de cuáles son los factores a nivel local que afectan a la desigualdad y la baja calidad educativa en Sombrerete.
Al tener una imagen de las deficiencias educativas, se podrán hacer aportaciones, ideas y diferentes estrategias para tener una mejora en los recursos, tecnologías y/o las distintas variables que se ven inmersas en esta problemática que bien no es sólo a nivel local, sino nacional.
Antecedentes
El Libro ISO 9000 en la Educación, habla de "calidad de la educación" incluye varias dimensiones o enfoques, complementarios entre sí. La primera dimensión es la eficacia: una educación de calidad es aquella que logra que los alumnos realmente aprendan lo que se supone deben aprender aquello que está establecido en los planes y programas curriculares, al cabo de determinados ciclos o niveles. En esta perspectiva el énfasis está puesto en que, además de asistir a clase, los estudiantes aprendan en su paso por el sistema. Esta dimensión del concepto pone en primer plano los resultados de aprendizaje efectivamente alcanzados por la acción educativa. Una segunda dimensión del concepto de calidad, complementaria del anterior, está referida a qué es lo que se aprende en el sistema y a su pertinencia en términos individuales y sociales. En este sentido una educación de calidad es aquella cuyos contenidos responden adecuadamente a lo que el individuo necesita para desarrollarse como persona intelectual, afectiva, moral y físicamente, y para actuar en los diversos ámbitos de la sociedad, el político, el económico, el social. Finalmente, una tercera dimensión es la que se refiere a los procesos y medios que el sistema brinda a los alumnos para el desarrollo de su experiencia educativa. Desde esta perspectiva una educación de calidad es aquella que ofrece al estudiante un adecuado contexto físico para el aprendizaje, un cuerpo docente convenientemente preparado para la tarea de enseñar, buenos materiales de estudio y de trabajo, estrategias didácticas adecuadas, etc. Esta dimensión del concepto pone en primer plano el análisis de los medios empleados en la acción educativa \citep{mxico}.
Existe un aporte al conocimiento de los factores escolares que inciden en el nivel de aprendizajes, teniendo en cuenta la posibilidad de que estos factores no fueran los mismos en diferentes contextos socioculturales, y considerando además la influencia que ejercen las escuelas en la reproducción intra-escolar de la desigualdad social.
Pretende abatir factores que obstaculizan el logro educativo de los educandos y que se derivan de la gestión del sistema educativo y de la escuela; pero también reconoce que existen condiciones estructurales de naturaleza socioeconómica que limitan el aprendizaje de los alumnos. Se menciona el hecho de que no basta con abrir escuelas para facilitar el acceso cuando las condiciones de hacinamiento, desnutrición y enfermedad hacen que sea un lujo para los niños pobres el mero hecho de asistir con regularidad a la escuela \citep{calidad}.
Uno de los señalamientos constantes, incluso antes de que se publicaran estos últimos resultados en pruebas nacionales e internacionales, involucró al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE). En una conferencia organizada por la OCDE, representantes de este organismo declararon que el SNTE era un "lastre" para la educación en México. Un estudio comisionado por la Secretaría de Educación Pública sugirió, además, que los poderes que se le han otorgado al SNTE a lo largo de décadas son ahora un obstáculo para que la SEP gobierne efectivamente el sector educativo. Este estudio encontró que, a pesar de ser empleados del gobierno, es el aspecto sindical el más importante rector de las relaciones laborales entre los maestros y la SEP y llega, incluso, a dictar su rango de acción y responsabilidades. Directores y supervisores, por ejemplo, reconocieron responder mucho más a la autoridad sindical que a la educativa. El argumento no es nuevo, ya que desde los años ochenta ha habido una tendencia a ver al SNTE como el "culpable" del estado de las cosas, como un "obstáculo a la innovación educativa [que resiste] cualquier iniciativa modernizante" \citep{snte}.
El Programa para la Modernización Educativa se propone, como prioridad, ofrecer a todos los niños mexicanos educación primaria de calidad y asegurar la permanencia de los mismos en la escuela durante el tiempo necesario para concluir el ciclo \citep{primaria}.
El presente libro otorga un diagnóstico de los servicios de supervisión escolar en la educación primaria en México que da cobertura a tres estudios regionales realizados en los estados de Chihuahua, Nuevo León y Aguascalientes. Con base en información empírica obtenida alrededor de un conjunto de directrices ofrecidas por el IIPE, estos explican desde diferentes aproximaciones metodológicas, como un mismo servicio educativo oficial definido formalmente a nivel nacional, ha sido entendido, interpretado y, sobre todo, puesto en marcha en la práctica cotidiana en diversos lugares dando como resultado diferentes maneras de operar. Es posible observar prácticas similares, casi idénticas, de la supervisión en los tres casos. Sin embargo, el contexto de cada uno marca ritmos y tendencias específicas. Así, patrones y procesos al mismo tiempo que adquieren particularidad propia, se diferencian entre sí \citep{ponton2002supervision}.
Desde el punto de vista del proceso sociocultural de construcción del conocimiento se considera que al hablar se realiza una construcción contextual de las concepciones o representaciones mentales, que puede producir múltiples versiones según la situación cotidiana en la que se realiza. Por eso hablo de construcción situacional del conocimiento. Esto conduce al reconocimiento de que la diferencia de contexto interactivo puede conducir a la elaboración de distintas conceptualizaciones sobre un mismo fenómeno. Un niño no elabora las mismas representaciones de un cierto fenómeno actuando aislado en un contexto experimental controlado, que cuando actúa en otro de interacción extraescolar con iguales o cuando lo hace en una situación escolar frente a un adulto que tiene el papel de enseñarle. Por tanto, el interés creciente por los contextos sociales de la cognición hace que el lenguaje, como el medio que une lo cognitivo con lo social, ocupe un lugar cada vez más importante para la psicología cognitiva \citep{educativa}.
La relación entre desigualdad social y educativa se analiza desde varios puntos de vista. En la perspectiva funcionalista dominante a mediados del siglo pasado, con diversos elementos críticos los trabajos sobre movilidad social tendían a ver la educación como una variable con importante influencia en dirección de una creciente igualdad social. Ejemplo de este tipo de estudios fueron, en Estados Unidos, los de Blau y Duncan y los de la escuela de Wisconsin, con Sewell, Hauser y Featherman. En el Reino Unido sobresalieron los de Halsey y en Francia los de Boudon \citep{escol}.
Al igual que la mayor parte de los países de la región, en México existe una acentuada desigualdad educativa, fenómeno del cual la diferencia de aprendizajes es una de sus manifestaciones más notorias. Uno de los hechos constatados en forma más sólida en la investigación es la relación de esta desigualdad con las diferencias en el nivel socioeconómico de los alumnos. Para la mayor parte de los niños y jóvenes, la educación formal no ofrece iguales oportunidades de aprender, sino que reproduce, multiplica e incluso intensifica las diferencias de entrada al sistema. Conocer este fenómeno no equivale, sin embargo, a explicarlo. El problema de fondo que ocupa a este trabajo refiere al papel que las instituciones educativas, y en particular las escuelas, tienen en este proceso de reproducción. En este sentido, me interesa comparar las explicaciones propuestas por dos corrientes cuyas bases conceptuales son marcadamente diferentes: las denominadas "teorías de la reproducción" y los estudios sobre eficacia escolar\citep{escolar}.
En la última década del siglo XX el sistema educativo mexicano (SEM) ingresa a una nueva etapa de su desarrollo. La firma del Acuerdo Nacional para la Modernización de la Educación Básica y Normal (ANMEB), el 18 de mayo de 1992, es el acontecimiento detonador de un amplio proceso de reforma de la educación básica y de la formación de maestros. Este hecho no es aislado, se inserta en un contexto más amplio de la Reforma del Estado mexicano y significa uno de los pactos políticos más importantes del siglo veinte al plantear decisiones sobre dos asuntos fundamentales para el desarrollo futuro del SEM: la descentralización del sistema educativo y una reforma curricular y pedagógica para la educación básica obligatoria y la formación inicial de maestros. La descentralización de la educación básica y la formación de maestros es una decisión política y ha provocado que los estados asuman sus nuevas responsabilidades de muy diversa manera. El proceso de descentralización y la reforma educativa han producido una nueva gama de problemas, escenarios inéditos y heterogéneos, así como una combinación inestable de consensos, rechazos, expectativas, incertidumbres y viejas prácticas que apenas empiezan a explorarse. Al ingresar nuevos actores en el escenario de la política educativa nacional aparecen o se hacen evidentes nuevas dificultades y obstáculos o nuevas posibilidades para la conducción del sistema educativo y para su desarrollo futuro \citep{perspectivas}.
Planteamiento del problema
Enunciado del problema
Desde que México ingresó a la OCDE, se ha encontrado que nuestro país se ubica en los últimos niveles de calidad educativa, según las investigaciones realizadas por dicha organización, lo que es alarmante para nuestra sociedad puesto que la educación es la base fundamental para el desarrollo económico y social de la población mexicana.
Formulación del problema
¿Qué influye en los bajos índices de calidad educativa a nivel básico en Sombrerete?
¿De qué manera impacta en el futuro de la juventud sombreretense?
¿Cuáles son las variables que influyen el papel de la sociedad en que estos índices sean bajos?
Objetivos
Objetivo General
Conocer y evaluar los aspectos principales de la falta de calidad en la educación primaria en cuestiones de preparación, infraestructura y cooperación de los alumnos.
Objetivos específicos
- Analizar los índices de calidad educativa en los distintos estados de la República mexicana para comparar el nivel en el que se encuentran las escuelas en Sombrerete con respecto a las demás.
- Conocer los aspectos que tiene como fuerte la educación en la región, así como sus deficiencias.
- Determinar medidas a partir de los resultados para aplicarse localmente.
Justificación
Es cierto que la educación y su casi nula calidad en regiones marcadas en México es una latente fuerte, y por ello se han realizado diversos estudios que permiten conocer todas y cada una de las diferencias que existen entre éstas. Ahora, la presente investigación pretende detectar a nivel local las necesidades que los habitantes nos exponen en cuanto a la educación de sus hijos, los factores que hacen que las mismas se proliferen o no existan en los diversos sectores de la localidad. Este proyecto investigador pretende poner en marcha planes para combatir y hacer menos notorias éstas diferencias que terminan por afectar no sólo a los niños, sino a la municipalidad entera. Sus beneficios son diversos, la educación debe manejarse conforme a las necesidades, recibir más apoyo si se está en una situación especial, de manera que esto trascienda y no sólo se quede como un estudio más. Los resultados que la investigación arroje, no se deben tomar a la ligera, pues si a simple vista no es de nuestro agrado el conocimiento o la forma en que lo reciben los niños, los estudios dan fe y claridad para tomar un curso de acción que fortalezca el modo, medios y conocimiento que debe darse para los niños.
Marco Teórico\citep{debayle2013}
Calidad educativa
Es evidente que la educación no puede entenderse como un producto físico o manufacturado sino como un servicio que se presta a los alumnos. Pero, al igual que ocurre con otros servicios, la naturaleza de este servicio resulta difícil de describir, así como los métodos para evaluar la calidad.
La dificultad de definir la calidad educativa seguramente deriva de hechos como los siguientes:
- La educación es una realidad compleja en sí misma, ya que afecta a la totalidad del ser humano, entidad ciertamente compleja y multidimensional. Por ello, si resulta difícil precisar el resultado que se debe obtener de la educación, no debe extrañarnos que resulte complicado establecer métodos y criterios para determinar el nivel de calidad.
- Existen notables diferencias entre las ideas o conceptos de lo que debe ser la educación. El resultado son las discrepancias sobre las metas o fines a lograr y sobre los procesos a llevar a cabo para lograrlo. Por ello, no disponemos de una teoría suficientemente consolidada para explicar la eficacia en el ámbito educativo.
- Los procesos mentales de aprendizaje no son evidentes, y sólo podemos inferirlos a través de los resultados que produce. En consecuencia, no podemos medir la actividad del intelecto de los alumnos, sino las manifestaciones externas de la actividad mental o intelectual.
- El educador es un ser libre y el motivo último de su comportamiento es siempre su propia decisión, más allá de los modelos en los que se haya formado. Ello hace que la elección sobre el tipo de enseñanza o modelo educativo sea una elección personal, que no siempre se corresponde con la trayectoria o el ideario de la institución educativa.
En la actualidad, encontramos diversos enfoques sobre el concepto de calidad educativa.
El primero de ellos se refiere a la eficacia. Un programa educativo será considerado de calidad si logra sus metas y objetivos previstos. Llevado esto al aula, podríamos decir que se alcanza la calidad si el alumno aprende lo que se supone debe aprender.
Un segundo punto de vista se refiere a considerar la calidad en términos de relevancia. En este sentido los programas educativos de calidad serán aquellos que incluyan contenidos valiosos y útiles: que respondan a los requerimientos necesarios para formar integralmente al alumno, para preparar excelentes profesionales, acordes con las necesidades sociales, o bien que provean de herramientas valiosas para el trabajo o la integración del individuo a la sociedad.
Una tercera perspectiva del concepto de calidad se refiere a los recursos y a los procesos. Un programa de calidad será aquel que cuente con los recursos necesarios y además que los emplee eficientemente. Así, una buena planta física, laboratorios, programas de capacitación docente, un buen sistema académico o administrativo, apropiadas técnicas de enseñanza y suficiente equipo, serán necesarios para el logro de la calidad.
La experiencia nos dice que la calidad no puede reducirse sólo a una de estas tres dimensiones, sino al concurso de las tres. Por consiguiente, la calidad depende de más factores.
El título IV de la \citep{1990} dedicado a la calidad de la enseñanza señala como factores que favorecen la calidad, entre otros:
- La cualificación y formación del profesorado.
- La programación docente.
- Los recursos educativos y la función directiva.
- La innovación y la investigación educativa.
- La orientación educativa y profesional.
- La inspección educativa.
- La evaluación del sistema educativo.
La calidad educativa se entiende como un servicio que se presta a quienes se benefician de la misma. Lleva implícita dos conceptos básicos, los de eficacia ( aquello para lo que fue realizado) y eficiencia (relación entre el costo y el resultado).
Por otro lado, la Consejería de Educación y Cultura se identifica con Pérez Juste1 cuando afirma que la calidad integral en educación pasa por “la armonización integradora de los diferentes elementos que la componen: eficacia en el logro de un servicio, bien u objeto excelente, mediante procesos eficientes, satisfactorios tanto para los destinatarios, directos e indirectos, como para el personal de la organización encargada de lograrlo”.
Se destaca que lo esencial es la satisfacción de los destinatarios y del personal de la organización. Es decir, la esencia de la calidad no se encuentra en el producto o resultado, sino en los destinatarios, que son quienes la determinan. Lo esencial es la satisfacción de las necesidades reales y percibidas por los usuarios, y no tanto el resultado o producto final.
Por tanto, una escuela de calidad o si se quiere una escuela eficaz es aquella en la que los alumnos progresan educativamente al máximo de sus posibilidades y en las mejores condiciones \citep{edu}.
En la tabla \ref{812181} se encuentran algunas definiciones del concepto de calidad educativa desde el punto de vista de algunos autores: