INTRODUCCIÓN
El quiste odontogénico ortoqueratinizado (QOO) es uno de los quistes menos frecuentes en cuanto al desarrollo dental ya que representan el 7% del 17% de todos los quistes queratinizados de la mandíbula. Tiene una mayor incidencia en hombres que en mujeres, con una relación de 3.2: 1. Predomina en pacientes adultos jóvenes, con una predilección por la tercera y cuarta década de vida, con una edad promedio de 35.4 años. Se presenta con frecuencia en la mandíbula, en la región de los molares y la rama mandibular.
Fue descrito en 1956 por Philipsen como una variante del queratoquiste odontogénico (tumor odontogénico queratinizante) y posteriormente identi fi cado como una entidad totalmente aparte por Wrigth en 1981 debido a las variantes histológicas y al comportamiento clínico que presenta.
El QOO comparte el mismo origen que el tumor odontogénico queratoquístico (TOQQ), porque ambos presentan lesiones intraóseas de los maxilares. Su desarrollo es a partir de restos de la lámina dental.
Desarrollo
El quiste odontogénico ortoqueratinizado se ha clasificado como un quiste de tipo odontogénico, ya que el epitelio que reviste la luz del mismo deriva del epitelio perteneciente al germen dentario. En la actualidad ha sido considerado una variante totalmente independiente ortoqueratinizada del queratoquiste odontogénico debido a sus diferencias histológicas y su comportamiento siendo este de menor agresividad y menor grado de recurrencia.
CARACTERÍSTICAS HISTOPATOLÓGICAS
El QOO se caracteriza por presentar, una pared tapizada por un epitelio estratificado, es decir, con varias capas de células siendo esta delgada con un espesor promedio de cuatro a ocho células. La capa de células basales de su epitelio se encuentran mucho más desarrolladas que el queratoquiste de forma cuboidal demostrando tener poco o casi nula polaridad o ser hipercromáticas. Siguiendo más a la superficie del epitelio en la capa espinosa se puede observar una variabilidad en cuanto a la forma de las células siendo estas poliédricas o chatas, con citoplasma eosinófilo y puentes intercelulares prominentes. La capa granular está bien desarrollada con su superficie recubierta por una queratinización completa de las capas superficiales llamada ortoqueratina pudiéndose apreciar como en las células no se observan los núcleos. Existe una diferencia en cuanto la maduración epitelial entre el quiste odontogénico ortoqueratinizado y el tumor odontogenico queratoquistico teniendo el primero una maduración gradual y continua desde la capa basal hasta la ortoqueratina. La transición de la capa basal a la paraqueratinizada es de manera abrupta en la mayoría de los casos. La interfase del epitelio conectivo es llana, con una discreta membrana basal separando ambos tejidos. El tejido que forma la cápsula del quiste está constituido por un tejido conectivo denso es decir con una mayor presencia de fibras que de células.